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Romper el monte
Autor: Ana Karina Delgado.
Medio: El Espectador (Crónicas desarmadas-ELEGANTE: Laboratorio de comunicación visual).
Encontrado en: DELGADO, Ana Karina. Romper el monte. En: Crónicas Desarmadas (portal web). Bogotá D.C. 08, marzo, 2018. sec. Historias.
Fecha de publicación: Agosto 03, 2018.
Fecha de rastreo: Noviembre 10, 2018.
Elaborada por: María Camila Ballesteros García.
Imagen tomada de: El Espectador.
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Generalizaciones
En el siguiente análisis se destacarán dos aspectos en específico; en primer lugar, se abordará el contenido del texto, o acerca de cuál es la problemática que se plantea en el mismo, y como segundo punto, será abarcará la técnica narrativa usada por el autor.
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La crónica habla sobre Rafael, un campesino criado casi toda su vida en la vereda Remolinos del Caguán, perteneciente al municipio Cartagena del Chairá, en el departamento del Caquetá. Cuenta que él, su familia y vecinos, iniciaron llegando a este lugar a ‘romper monte con peinilla’ y a hacer vida allí, siendo la coca lo que movía la economía del lugar, pero las aspersiones con glifosato sobre el Caquetá, lograron que el cultivo de ésta se desplazara a otros departamentos. También se aborda la deforestación de los bosques a causa de la ganadería y cómo preferían la presencia de las FARC, que del ejército colombiano, pues un día, sin previo aviso, llegó el ejército y arrasó con varios líderes metiéndolos en la cárcel y allí fue a parar él, 6 años.
Es preciso recalcar aspectos más importantes de la técnica de la autora:
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La voz predominante en la historia es la del campesino, de quien en un principio no se sabe su nombre, es cuando se está por el final del escrito que otro personaje lo llama por su nombre. Todo el texto se da en primera persona y podría parecer un perfil, pero son los hechos y la narrativa lo que hace que la historia no se centre sólo en Rafael.
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En ningún momento de la historia infiere la autora, por el contrario, todo lo cuenta por medio del personaje.
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No cuenta con elementos calificativos o figuras literarias, propios de una crónica.
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La crónica es más narrativa, que descriptiva, quizás por ser contada por el personaje. Por ello, se pueden perder ciertos momentos importantes que podrían esclarecer cómo fue la transición de la guerra y el sustento por medio de la coca; a la tranquila, aunque aún pobre vereda.
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Cuenta con ciertos errores ortográficos, sobre todo por falta de tildes, incluso sobra de ellas en palabras que no las lleva.
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Supresión
Es probable que se evidencia algo de supresión por parte de la autora, en el sentido en que difícilmente reveló el nombre del campesino, además de que hay momentos en los que el personaje principal habla de fechas o años exactos, a veces no se tiene claro en qué año va la narrativa histórica. Se puede analizar también, que se narran historias que tienen que ver con la problemática, de una forma muy superficial y precisa, a lo que se habría podido profundizar un poco más.
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Construcción
Las palabras-frases que más se repiten son:
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Monte (6 veces).
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Coca (6 veces).
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Las FARC (6 veces).
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Ejército (9 veces).
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Hectáreas (9 veces).
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Guerrilla (16 veces).
Las palabras que más predominan nos confirman la importancia de cuál fue la intención narrativa de la escritora, dado que abunda o se centra en la problemática. Dándonos cuenta de que en Remolinos del Caguán los campesinos tenían cantidad de hectáreas apropiadas y que allí más que la presencia del ejército colombiano, las guerrillas mandaban en el territorio y para bien o para mal, los habitantes del lugar los preferían a ellos, porque trabajaban en conjunto por la coca y no los sacaban del monte; como sí lo hacía el ejército, llevando presos a la mayoría, por querer cumplir con los resultados que el gobierno de ese entonces les exigía.